El duro y gratificante aprendizaje del kite. (Por Nieves)

Bueno, vamos a ver si con este escrito consigo dos cosas: primero trasmitir todos esos sentimientos que le pasan a uno cuando está en el inicio de este deporte y, por otro, mi propia experiencia y aprendizaje que no ha hecho más que empezar.
Todo esto se ve influenciado porque el domingo pasado conseguí hacer mi primer largo!!!!!!!!!!!!
Es una sensación alucinante, difícil de trasmitir con palabras como todas las grandes sensaciones, seguro que todos sabéis de lo que hablo pero aquí van algunos de mis aprendizajes adquiridos en forma de anécdotas:

El kite es peligroso: Allí estaba yo, después de un invierno en el que el frío me había echado para atrás, en junio vuelvo a meterme en el agua, los primeros días increíbles, la playa sola para unos cuantos, todavía hace frío, pero con los días llega el buen tiempo y llega la gente a la playa. Domingo, la Punta de la Canaleta a reventar de gente y un montón de cometas en el agua. Yo acojonada, intentando buscar los espacios vacíos, al final se va alguna gente y me atrevo a meterme en la parte balizada. Y en una de estas veo a dos chavales bañándose.

- yo a gritos: “perdona, a bañarse al otro lado de las balizas, que esto es peligroso”
- los dos chavales: “¿te pasa algo?, ¿necesitas ayuda?”
- yo: “que digo, que esto es peligroso!!!, que tengáis cuidado joder!!!, que hay mucha gente aprendiendo que no controlamos bien!!, iros a bañarse al otro lado de las balizas.
- El chaval: ¿Pero te pasa algo??
- Yo: No!!!…y en ese momento me doy cuenta que es uno de los monitores de kite del grupo de JuanCa.
- yo: ah!, hola, no te había conocido, no, que decía que el kite es peligroso, que tengáis cuidado.
- El chaval descojonado de la risa: Ah!!!, si, si, no te preocupes, ahora nos salimos.
- yo: “vale, vale, hasta luego. Oye!!, que si se me cae la cometa me echéis una mano ¿vale?...
- El chaval: sí, tú tranquila, y ánimo, y gracias por la advertencia, que es verdad que el kite es peligroso….Unos días más tarde me invitaron a una cerveza y brindamos porque el kite es peligroso…(Ay que joderse, mira que había gente en la playa y la novata dando lecciones a los monitores) . El caso es que, el kite si no se hace con precaución es peligroso, al menos esa es mi opinión.

Con la práctica todo se consigue: cuántas veces me habréis repetido esta frase, y es que es verdad, la práctica y la constancia son una necesidad en este deporte, sobre todo en los comienzos, donde la sensación de avance es vertiginosa, y consigues ponerte la tabla, y te metes en el agua aunque casi no haga viento, y si hace mucho viento te aguantas un poquito viendo a los que ya navegan, y al poco tiempo ya sales y te pones un poquito de pie, y alucinas, y es una lucha pero a la vez una satisfacción muy fuerte por el logro conseguido. Las sensaciones son muy gratificantes. El hecho de estar en el agua y practicar un deporte en el mar para quien le guste ya es un regalo cada vez.

La diversión hay que trabajarla, lo que sí ocurre es que se siente esa “diversión pura de los niños”, que con responsabilidad, se consigue también en el kite. De la técnica mejor todavía no hablo pero lo que sí pienso es que hay formas muy diferentes de navegar y hay algo de uno mismo que se trasmite en la forma en que cada uno navega.

¿Qué pasa que no avanzo?: Esta fase es la desesperación total, por lo menos, yo he pasado por ella, después de un aprendizaje rápido, llegan los días en que practicas una y otra vez los mismos ejercicios y nada, parece que no avanzas, o que avanzas muy muy despacito, ya te has peleado con el mar, con las olas, eres casi un molusco por la cantidad de agua que has tragado, intentas poner la postura, la mayoría de las veces sales pero te caes, y venga, y otra vez, y nada, y otra vez, y nada…Y sí, tienes una pequeñísima sensación de avance pero en este momento concreto la desesperación y la ansiedad por navegar te pueden. En este punto es fundamental, por un lado la constancia y la paciencia, y por otro, escuchar los consejos de los que ya navegan.
Entiendo perfectamente que haya gente que en este punto abandona, pero en el fondo es otra prueba más y tampoco es “pa tanto”. Y desde luego merece la pena.

Ya veo a la gente en el agua!!!: Este día también es divertidísimo; porque claro, cuando empiezas, no dejas de mirar la cometa ni un segundo incluso cuando estás en el agua, y a la gente realmente no la ves, sí, ves figuras y cometas pero no diferencias, simplemente tratas de evitarlos. Y de repente, un día sientes como que tu vista panorámica cambia, parecido a cuando aprendes a conducir, que al principio no ves nada, y después vas viéndolo todo en otra perspectiva. Bueno, pues en el kite llega el día en que te metes en el agua, aunque todavía hagas poco más que ponerte la tabla, pero ves a la gente!!!, la cometa la sientes y el movimiento se trasmite al cuerpo, no hace falta tener todo el tiempo la vista fija en la cometa.
Total, que lo mínimo me parecía saludar: “Hola!”, “Hola, qué tal?”…parecía que estaba repartiendo algo, eso sí sin soltar la cometa de las manos… hasta que te haces con la sensación de ver y conocer a la gente desde el agua, ¡¡¡sin que haga falta saludar en cada pasada!!!!...

Los consejos y la buena gente: por último recordar y agradecer a la buena gente que rodea este deporte, todos los consejos, las miradas y sonrisas de apoyo, las bromas, cualquier pequeña consideración o corrección, aunque parezca obvia, para alguien que está aprendiendo es todo un regalo. Bueno, es un regalo, siempre, pero para alguien que está aprendiendo más.

Muchos han sido los consejos, algunos de ellos: “paciencia, no quieras hacer lo que los demás, es un camino que tiene que recorrer cada uno a su ritmo, lo importante es dar todos los pasos”, “haz pequeños descansos pero muy repetidos, muchas sesiones pero cortas, evolucionaras más rápido”.”Nunca digas "la ultima vez y me salgo, salte directamente.”.
“Estira la pierna!!!!!!!!!!”, “Échate para atrás”, “deja que sea la cometa la que tire de ti”, “estate pendiente del viento, adáptate” “Aprende también observando”…en fin muchos consejos, que se te vienen todos a la cabeza cuando por fin haces tu primer largo y no sabes si te volverá a salir, pero ya no hay quien te baje de este deporte porque la sensación es muy fuerte en todos los sentidos.

Así que nada, hasta la próxima: aquí podría nombrar a mucha gente, algunos ejemplos: Manolo Oliveira que tiene el arte de enseñar cuando habla, Sergio que con pequeños matices consigue que entiendas lo que pasa, Antonio Vargas que contagia las ganas, Felipe que observa y trasmite estupendamente, Raúl que da gusto verle en el agua, Alex que es puro vicio en la tabla, David que es la referencia en la playa, Damian que es la provocación sana para los demás y Antonio Abellán que “sin estar”, siempre está. Y a muchos más a los que en algún momento os he dado las gracias y que desde aquí os las doy.

En el kite, cada día es una aventura, así que nada…a vivirlas y disfrutar de cada una.
Nos vemos en el agua!!!!!
Un beso.
Nieves.