Primera navegada, de la temporada, en la Ría de Punta.

Domingo, 9:00 de la mañana, Manolo, David y yo nos dirigíamos a Punta, primero a desayunar y después ha esperar que el viento de Norte que se previa para la mañana de hoy nos permitiera pegarnos la primera navegada de la temporada en la Ría de Punta.


Primero desayunamos nosotros y después con Sergio, cuando este se presento un poco más tarde. Terminado el desayuno nos dirigimos a la mini-playa de la Ría de Punta a ver como estaba la cosa. Una vez allí, el panorama era poco favorable. Por más que sacábamos el anemómetro, esperando ver en su pantalla un 12, este mostraba números nada alentadores.


Un mini paseo por el espigón de Punta, charlas con unos y con otros que se pasaban por allí, para ver como estaba el panorama, observásemos como un 'palillero' se pega unos largos de categoría y en esas que el viento parece subir. Empezamos todos a montar y el viento seguía subiendo, por momentos incluso se me paso por la cabeza montar la 8m., pero al final, al igual que todos, monte cometa grande, es decir, 12m. Sergio 11m., Manolo y David 14m. entre pecho y espalda.


El primero en salir es David, que veo que se dirige a la desembocadura de la ría. No me gustaba esa opción y centre mi objetivo en meterme en el lago que se forma por detrás de la primera lengua de arena que se ve desde la playa, me parecía una zona más segura, más resguardad y con Norte todas las precauciones son pocas. Es una zona que también tiene sus inconvenientes y hay que tener mucho cuidado donde se pone los pies, por eso hay que hacer todo lo posible para no caerse y permanecer montado en la tabla.


Después de bastantes bordos termine entrando en el lago y al poco tiempo veo como toda la tropa se dirigía a mis dominios, y como suele ocurrir en estos casos, llegaron en pocos largos. A pesar que el día y la zona invitaban a hacer una navegación segura 100%, arriesgando cero, me atreví a pegar varios saltos y algunos de ellos, por lo menos a mi me lo parecieron, de una altura respetable.


Después de un rato navegando, hubo un par de veces que me quede clavado, sin viento, lo que me hizo plantearme que era el momento de ir pensando en la vuelta. Poco a poco me fui acercando a la playa, me pegue unos cuantos largos por la ría y la lengua de arena que hay en frente, aproveche para ponerme un par de veces en 'feki', hacia mucho tiempo que no lo hacia. Sergio y Manolo se exhibían ante un selecto grupo de curiosos que se amontonaban en la playa y al grito de "otro, otro, otro, ...", jaleaban las maniobras de nuestros pro.


Yo fui el primero en bajar la cometa y dar por concluida la navegada. Al poco tiempo, Manolo, David y Sergio también daban por concluida la sesión norteña. Después de la navegación, un pequeño incidente, sin importancia, con la llaves del coche de Manolo, las típicas pullitas, que no pueden faltar en cualquier sesión. Cuando ya teníamos todo recogido y nos íbamos, el único que permanecía en el agua era Luis Cortes, que había llegado tarde y quería apurar el día.


Luis Cortes disfrutando de la navegada.
Luis Cortes disfrutando de la navegada.

Fueron muy comentadas dos cuestiones: la navegada de Sergio, hasta la plaza Perez Pastor, quizás arriesgo más de la cuenta y se encontró con alguna que otra situación incomoda y los cortes de Manolo en el píe, que fueron curados por las niñas y gracias al botiquín que Lucia y yo solemos llevar en el coche.


Después de la llegadas de las 'respectivas', nos fuimos los ocho a comer a un bar de punta, un sitio bastante tradicional, con un patio interior muy bien acondicionado y donde tuvimos una comida muy agradable, a pesar de la caña que me dieron con el blog. Pero pasamos un buen rato, cosa que ya viene siendo habitual con una compañía de esta categoría.


Una foto de todo el grupo.

Después de la comida y solventadas unas dudas iniciales, nos fuimos todos a la casa de Sergio; cafeses, dulces de varios tipos (vaya pedazo de tarta de galleta y chocolate que se marco Inma), Damian que apareció por la reunión, y otro rato de charla fantástico. La próxima navegada-comida ofrezco mi casa para el cafelito, condición 'sinecuanum' para ello es que Inma lleve tarta y lo que sobre (complicao) se quede en casa.


Un muy buen día, que viendo las previsiones, no se cuando podremos volver a repetir. De momento nos quedamos con las 'sensaciones' de esta última navegada, fuera y dentro del agua, que ya vendrán otras, que por supuesto aquí contaremos y espero que vosotros las disfrutéis.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Anda que no!!
Vaya dia...
Habrá que repetirlo. Esperemos que el viento nos de la excusa pronto...
saludos a tod@s
Manolo
Anónimo ha dicho que…
la verdad q buen dia y mejor compañia.espero q se repita pronto aunq sea con norte pr al menos nos quitamos el mono.saludos david

Entradas populares