Un fin de semana completito en Isla Canela

Teniendo como escusa una competición de kite (organizada por KanelaExtreme) que se iba a celebrar en Isla Canela; nuestra kiter favorita Bea (que esperemos que pronto esté recuperada de su lesión y la tengamos en el agua navegando con nosotros) tuvo la iniciativa de juntarnos en Ayamonte, que junto a la inestimable ayuda de Lourdes (Ayamontina de pro) organizarón un fin de semana con un poco de kite, buena comida, muy poco de alcohol, casi nada ;-), algo de juerga, una pizca de guasa y muy, muy, muy buen rollo. Esos eran los ingredientes del fin de semana, al que tuve la fortuna de estar invitado y poder participar, a mi manera.

Todo empezó el Sábado, comí en Huelva y me fui directo para Isla Canela, a 90 Km/h con el 'peazo' de 205 de mi madre, que tendrá cerca de 20 años, pero es todo un aparato. Las previsiones no eran muy buenas, pero me lleve la 12m. para ver si se podría navegar. Cuando llego Fran, Manolo y Sergio se están apuntando a la competición, en la modalidad de regata. Me insisten para que me apunte con ellos, pero no tengo muchas ganas de meterme en el agua con una patulea de gente, en las que te puedes encontrar cualquier cosa.

Había unas cuantas cometas en el agua, las condiciones parecían buenas para navegar. Después de saludar a toda la tropa (además de los ya citados, Bea, Blanca, Inma y Lurdes), monto mi switchblade de 12m. y me meto en el agua, intentado salvar el tráfico y salir disparado para áreas más despobladas. Las condiciones eran fantásticas, podía navegar con soltura y moverme por una amplísima zona. Podía ver como los participantes de la regata se desplazaban en busca de las bollas que marcaban el recorrido, por allí vi a Manolo y a Sergio. Yo intentaba moverme al sentido contrario que ellos, cosa que en ocasiones, por lo desperdigado de la flota, no era fácil.

Al final me pegue una navegada de cerca de 3 horas. Que pena no tener una cámara de fotos mientras se navega, era impresionante la imagen de la linea de playa con el colorido de las cometas participantes en la regata. Termino la regata y yo continué navegando, me crucé con Manolo y pude ver a Sergio pegando saltos muy altos, con las pocas fuerzas que le quedaban, y esos saltos iban acompañados del grito "ese en mi novio", 'pa velo'.

Después de la navegada, la ducha en la playa y esperar a que el personal se 'makeara' en sus respectivos alojamientos 'de prestao', terminamos todos en un restaurante en Canela, donde pudimos disfrutar de una muy buena comida (algunos no tiene fondo) y una aun mejor compañía. Después, unos copitas en los locales de moda de Ayamonte y de vuelta a casa con ese 'peazo' de 205.

El Domingo, cuyas previsiones eran mejores que el día anterior, fue un fracaso en cuanto a la navegación. No llegué ni a montar la cometa, me contaron que el viento entro a las 14:00 de la tarde, pero cuando llegué, sobre las 16:30, este estaba bajando y las pocas cometas que había en el agua terminaron sobre la arena de la playa y sus amos tirados a la espera de que el viento subiera, cosa que no ocurrió en toda la tarde. El Domingo paso sin pena ni gloria, un cafelito y la venta de una cometa por parte de Sergio pusieron el colofón a un gran fin de semana, en el que se pudo disfrutar del kite y sobre todo, de la buena compañía. Esperemos que este tipo de encuentros no se demoren en el tiempo y pueda asistir a la siguiente, esta vez con mi media naranja.